Guía de la Biblia. Antiguo Testamento (61 page)

Read Guía de la Biblia. Antiguo Testamento Online

Authors: Isaac Asimov

Tags: #Histórico

BOOK: Guía de la Biblia. Antiguo Testamento
5.43Mb size Format: txt, pdf, ePub

Al rey David se le atribuye tradicionalmente la autoría de los salmos, de modo que el libro se denomina a veces «Los salmos de David». Ciento un salmos tienen títulos que incluyen el nombre del autor, y en setenta y tres casos es el de David; a veces se dan detalles sobre las circunstancias en que escribió el salmo.

Sin embargo, es imposible demostrar la autoría de ningún salmo concreto. El Salterio es una serie de cinco antologías distintas de salmos, que no debieron alcanzar su forma definitiva hasta el 150 aC. Algunos indican claramente su origen postexiliar, aunque es muy posible que otros se remonten a tiempos bastante primitivos, incluso a los de David.

Resulta natural la tentación de atribuir salmos a David. En libros históricos se le describe como un arpista consumado. Cuando le aquejaba la melancolía, el monarca buscaba alivio en la música:

1 Samuel 16.17.
Saúl les dijo: «Buscadme, pues, un buen músico y traédmelo».

1 Samuel 16.18.
Tomando uno de los servidores la palabra, dijo: «Yo conozco a un hijo de Isaí... que sabe tañer el arpa...

Y cuando llevaron a David a la corte:

1 Samuel 16.23.
... David tomaba el arpa, la tañía con su mano, y Saúl sentía alivio...

Además, hay obras poéticas intercaladas en el segundo libro de Samuel y atribuidas a David. La más notable es la endecha sobre Saúl y Jonatán, al parecer compuesta por David tras la desastrosa batalla de Gélboe; elegía que comienza así:

2 Samuel 1.19.
«Tu gloria, Israel, ha perecido en tus montes, ¿cómo cayeron los héroes?

También se le atribuyen salmos propiamente dichos:

2 Samuel 23.1.
Éstas son las últimas palabras de David... del dulce cantor de Israel...

Es lógico, pues, atribuir cualquier salmo especialmente bueno o popular al dulce cantor de Israel.

El hijo

El salmo 2 es un ejemplo de uno que parece anterior al Exilio. Está claro que se escribió para celebrar la coronación de un nuevo rey, y por las características arcaicas de su lenguaje, suele situarse en tiempos de la monarquía.

El salmo imagina a los pueblos sometidos planeando la rebelión y a los enemigos pensando en atacar, tal como era habitual en aquella época insegura cuando un rey nuevo subía al trono. Entonces habla el nuevo rey diciendo que Dios está de su lado y que le promete dominio y poder:

Salmos 2.7.
... Él
(Yahvé)
me ha dicho: «Tú eres mi hijo, yo te he engendrado hoy...

Los reyes de las monarquías antiguas del Cercano Oriente solían considerarse como hijos adoptivos del dios nacional, y el día de la coronación constituía el momento en que eran «engendrados» como tales hijos. Los judíos no estaban enteramente libres de esta concepción.

Así, cuando el profeta Natán informa a David de que Dios no desea que, como guerrero, construya el Templo, añade, a pesar de ello, que Dios establecerá en el trono al linaje de David y que tendrá un cuidado especial de la monarquía:

2 Samuel 7.13.
... yo estableceré su trono
(de David)
por siempre.

2 Samuel 7.14.
Yo le seré a él padre, y él me será a mí hijo...

Pero el posterior pensamiento cristiano ahondó en tal concepción. Se consideraba que Jesús, en su calidad de Mesías, tenía una relación especial con Dios; parentesco que se expresaba con mayor facilidad en la palabra «hijo». Por tanto, se considera que este salmo tiene un significado mesiánico, y aunque se escribiera pensando en un rey terrenal, posee un significado más profundo y se aplica al Mesías. Por esa razón, la versión King James pone con mayúscula la palabra «Hijo» en el duodécimo versículo del salmo. La Revised Standard Version, que se ocupa menos de las profecías mesiánicas, lo pone con minúscula.

Selah

El salmo 3 es el primero que tiene título:

Salmos 3.1.
Salmo de David al huir de Absalón, su hijo.

En hebreo, esto puede significar tanto «Salmo escrito por David» como «Salmo acerca de David», y hay que observar que la frase «Salmo de David» también puede tener ambos significados en castellano. Pero tradicionalmente se cree que quiere decir «escrito por David». El salmo contiene una palabra extraña al final de tres versículos:

Salmos 3.3.
[156]
Muchos son los que de mi vida dicen: «¡No tiene ya en Dios salvación!» Selah.

La expresión «Selah» aparece un total de setenta y una veces en el libro de los Salmos, casi siempre al final de un versículo, y normalmente al término de una pausa natural de la idea expresada. Es posible que dé alguna sugerencia a los que cantan el salmo, pero nadie sabe nada acerca de tal indicación.

Neginoth

A veces se dan en los títulos otras indicaciones respecto al acompañamiento musical de los salmos.

Salmos 4.1.
[157]
Al músico principal: sobre Neginoth ...

Salmos 5.1.
[158]
Al músico principal: sobre Nehiloth...

Neginoth
significa «instrumentos de cuerda», y
Nehiloth
, «flautas» o «instrumentos de viento». La Revised Standard Version titula el Salmo 4 de este modo: «Al maestro de coro. Con instrumentos de cuerda»;
[159]
y así el Salmo 5: « ... A la flauta».
[160]

El título del Salmo 6 es de interpretación más difícil:

Salmos 6.1.
[161]
Al músico principal: en Neginoth sobre Seminith...

Seminith
significa «la octava», por lo que puede :significar un instrumento de ocho cuerdas. También puede referirse a una octava, y tal vez signifique que el salmo debe cantarse a dos voces y una octava. El título del Salmo 7 es aún más intrigante:

Salmos 7.1.
[162]
Sigaión de David, que cantó a Jehová sobre las palabras de Cus, hijo de Benjamín.

Se desconoce el significado de
Sigaión
(shiggaion) y, a la desesperada, suele considerarse que significa «salmo». Por si esto fuese poco enigmático, la referencia a Cus, hijo de Benjamín, es igualmente misteriosa, pues la Biblia no hace mención en ningún otro lugar a este incidente.

También es inútil tratar de interpretar los títulos de los dos salmos siguientes:

Salmos 8.1.
Al maestro de coro. A «la getea»...

Salmos 9.1.
Al maestro de coro. Al «mutlaben»...

«La getea» es, probablemente, una especie de instrumento musical, pero no se sabe cuál. El
mutlaben
puede descartarse de la misma manera; parece significar «muerte de», pero eso no puede ser. O significa otra cosa, o se trata de una errata del copista, por lo que no puede llegarse al significado original.

El Salmo 9 contiene otra palabra misteriosa:

Salmos 9.17.
[163]
... quedó preso el impío en la obra de sus manos. Higayon. Selah.

Higayon
significa «meditación», y tal vez indique una pausa para que los cantores mediten sobre lo que han cantado. El título del Salmo 16 es:

Salmos 16.1.
Miktam. De David...

Miktam
tiene vinculaciones con la palabra hebrea que significa «oro», y es de suponer que los antólogos que reunieron este grupo considerasen el Salmo 16 como especialmente bueno; es decir, un «salmo dorado».

Seol

El Salmo 18, uno de los más largos, tiene un título semejante:

Salmos 18.1.
... Del... David... cuando le hubo librado Yahvé de las manos de todos sus enemigos y de la mano de Saúl...

Este salmo se cita en el capítulo vigésimo segundo de 2 Samuel tras la descripción de las rebeliones de Absalón y de Soba (v. cap. 10). Efectivamente, David se ve libre de todos sus enemigos, pero resulta chocante que se mencione a Saúl, adversario que desapareció una generación antes.

Una posibilidad, aceptada por la Anchor Biblie, es que «Saúl» sea un error del copista por
Seol
, el más allá (v. cap. 2). Se trataría entonces de un salmo de agradecimiento porque el cantor se ha salvado de la muerte:

Salmos 18.5.
[164]
Ya me rodeaban las olas de la muerte...

Salmos 18.6.
[165]
Me aprisionaban las ataduras del seol...

Incluso en el período inmediatamente posterior al exilio, la imagen del
seol
es la de una existencia en la sombra, semejante a la del Hades griego y no como la que entrañan las concepciones posteriores del infierno. La palabra suele asociarse con la existencia subterránea, como indica el empleo común del término «fosa» para
seol
:

Salmos 28.1.
... me asemeje a los que bajan a la fosa.

Hay sinónimos de
seol
que indican algo peor que la simple no experiencia en la sombra. Así, en el libro de Job, éste describe su desgracia como si viera el infierno en vida:

Job 26.6.
El seol está desnudo ante Él, y sin velos el abbadón
.
[166]

Y en el libro de los Salmos:

Salmos 88.12.
[167]
¿Contará alguno en el sepulcro tu piedad, y en el averno tu fidelidad?

En estos dos versículos, el paralelismo de la poesía hebrea convierte a la palabra «destrucción» en sinónimo de sepulcro o de seol. «Destrucción» es la traducción directa de la palabra hebrea
abbadón
. La Revised Standard Version lo deja sin traducir para recalcar que se trata de un lugar y no de una operación abstracta.

El hecho de que
abbadón
signifique «destrucción» o «ruina» incluye un matiz más pavoroso que el que se logra con la palabra
seol
, relativamente neutra. La Anchor Bible traduce
abbadón
como «perdición» en Job 26.6. Esa palabra viene de un término latino que significa «ruina» o «pérdida», y recalca los peores aspectos de
seol
al tiempo que ilustra el creciente concepto de infierno como lugar de tortura y de castigo eterno.

Poco a poco,
abbadón
dejó de significar un lugar para designar a un monstruo al cargo de dicho lugar. Abbadón se convirtió en el espíritu maligno de las torturas del averno, una especie de Torquemada de los infiernos. Bajo esa condición se le menciona en el Nuevo Testamento, en el libro del Apocalipsis:

Apocalipsis 9.11.
... un ángel del abismo, cuyo nombre es en hebreo Abbadón y en griego tiene por nombre Apolyon.

Apolyon
, palabra derivada de un verbo griego que significa «destruir por completo» es uno de los elementos alegóricos de
El viaje del peregrino desde este mundo al otro
, el libro de John Bunyan publicado en 1680. La gran popularidad de la obra de Bunyan ha hecho familiar a Apolyon en la figura de un espíritu maligno armado con flechas llameantes.

Querubines

Al menos en parte, el Salmo 18 debe ser muy antiguo, porque se describe a Yahvé como a un dios de las tormentas, al estilo del arcaico Cántico de Débora (v. cap. 7).

Salmo 18.11.
[168]
Subió
(Yahvé)
sobre los querubes y voló; voló sobre las alas de los vientos.

Los querubines suelen describirse de manera antropomorfa, como poderosas criaturas aladas y sobrenaturales (v. cap. 2), pero en este versículo se atisba más allá, entre los fenómenos naturales que inspiraron tal idea. Este pasaje del salmo describe las terribles catástrofes naturales (terremotos, volcanes, granizos, truenos) que parecen mostrar directamente el poder arrollador de Dios. Los querubines pueden representar el estallido de la tormenta, el poder tremendamente destructivo del aire invisible.

Ajelet Shahar

El Salmo 22 se titula:

Salmos 22.1.
[169]
Al músico principal, sobre Ajelet Shahar...

La Revised Standard Version traduce
Ajelet Shahar
por «la cierva de la aurora». Es posible que así se titule alguna melodía famosa con la cual se cantase el salmo. Si es así, lo mismo puede suceder en otros casos:

Salmos 46.1.
[170]
... Salmo sobre Alamoth.

Salmos 56.1.
[171]
Al maestro de coro. Sobre Jonath elemrekojim...

Salmos 57.1.
[172]
Al maestro de canto. Sobre Altaschith...

Salmos 60.1.
Al músico principal: sobre Susan Heduth ...
[173]
.

La Revised Standard Version traduce
Jonath elemrejokim
como «la paloma de los terebintos lejanos». En cuanto a
Alamoth
y a
Susan Heduth
, la Revised Standard Version lo deja sin traducir, pero parecen significar «las jóvenes doncellas» y «lirio del testimonio».

Al-taschith
significa «no destruirás». ¿Pueden ser éstas también las primeras palabras de una melodía famosa de la época? ¿O hizo algún copista alguna nota apresurada para asegurar la integridad de un ejemplar que acababa de preparar, y esa pequeña nota se incorporó de manera irreversible al canon bíblico?

Acrósticos

El salmo 25 tiene una estructura que se pierde por entero en la traducción inglesa. Cada línea empieza con una letra diferente del alfabeto hebreo, en sucesión ordenada. El primer versículo empieza con
alef
, el segundo con
bet
, el tercero con
químel
, etc.

Tal ordenamiento, en el que las letras iniciales de versos sucesivos (o las letras finales, o las dos cosas) repiten en orden el alfabeto o forman palabras, se denomina acróstico, término derivado del griego y que significa «finales de versos».

El 25 no es en absoluto el único salmo acróstico. El 34 es otro ejemplo. El 119 es especialmente complejo, porque se compone de 22 partes, cada una de las cuales contiene ocho versos. Cada parte viene encabezada por una letra sucesiva del alfabeto, y cada uno de los ocho versos de esa parte empieza con la misma letra.

También se encuentran acrósticos bíblicos fuera del libro de los Salmos. La parte última del capítulo final de los Proverbios es un poema anacróstico que alaba a la mujer virtuosa. Y también, cada uno de los cuatro primeros capítulos de Lamentaciones es un poema acróstico.

El acróstico tiene su utilidad. Al empezar cada verso con una letra en orden alfabético, el recitador tiene asegurado un recordatorio. Además, para un poeta es agradable mostrar su virtuosismo escribiendo un poema bello dentro de los límites de una convención artificial. Por otro lado, los límites así impuestos obligan con frecuencia al escritor a contentarse con resultados menos brillantes, y los poemas acrósticos de la Biblia tienden a carecer de cierta lógica en la secuencia. Ha de escribirse un verso que encaje con la inicial del siguiente, en lugar de encerrar la idea anterior.

Other books

How a Star Falls by Amber Stokes
Don't Bet On It by J. L. Salter
The Sound of Many Waters by Sean Bloomfield
Prudence Couldn't Swim by James Kilgore
Fortune's Favorites by Colleen McCullough
Paul McCartney by Philip Norman
Mourning Lincoln by Martha Hodes