Estado de miedo (73 page)

Parkinson, C. L. «Trends in the Length of the Southern Ocean Sea-Ice Season, 1979-99».
Annals of Glaciology
34 (2002): 435-440.

Parsons, Michael L.
Global Warming: The Truth Behind the Myth
, Nueva York: Plenum, 1995. Una revisión escéptica de los datos a cargo de un profesor de ciencias de la salud (y por tanto no un científico del clima). Un análisis de los datos visto desde fuera.

Pearce, Fred, «Africans go back to the land as plants reclaim the desert»,
New Scientist
175 (21 de septiembre de 2002): 4-5.

Penn y Teller.
Bullshit!
Programa de televisión. Ataques enérgicos y divertidos a la sabiduría tradicional y las vacas sagradas. El episodio en que una joven solicita a los ecologistas que prohíban el «monóxido dihidrógeno» (más conocido como agua) es especialmente divertido. «El monóxido dihidrógeno —explica— se encuentra en los lagos y los ríos, permanece en las frutas y verduras después de lavarlas, hace sudar…». Y la gente lo suscribe. Otro episodio sobre el reciclaje es la explicación breve más clara sobre qué es correcto y qué incorrecto en esta práctica.

Pepper, David.
Modern Environmentalism: An Introduction
. Londres: Roudedge, 1996. Un detallado relato sobre las múltiples líneas de la filosofía ecologista a cargo de un observador afín. Junto con la obra muy distinta de Douglas y Wildavsky, este libro analiza por qué distintos grupos sostienen puntos de vista incompatibles, y por qué el acuerdo entre ellos es improbable. También aclara en qué medida las opiniones ecologistas incluyen creencias sobre cómo debe estructurarse la sociedad. El autor es profesor de geografía y escribe bien.

Petit, J. R., J. Jouzel, D. Raynaud, N. L Barkov, J. M. Barnola, L Basile, M. Bender, J. Chappellaz, M. Davis, G. Delaygue, M. Delmotte, V. M. Kodyakov, M. Legrand, V. Y. Lipenkov, C. Lorius, L. Pepin, C. Ritz, E. Saltzman, y M. Stievenard. «1999. Climate and atmospheric history of the past 420,000 years from the Vostok ice core, Antarctica»,
Nature
399: 429-436.

Pielou, E. C.
After the Ice Age: The Return of Life to Glaciated North America
. Chicago: University of Chicago Press, 1991. Un magnífico libro, un modelo en su especie. Explica cómo volvió la vida cuando los glaciares retrocedieron hace veinte mil años, y cómo analizan los científicos los datos para llegar a sus conclusiones. A la vez, un excelente recordatorio del espectacular cambio experimentado por nuestro planeta en el pasado geológico reciente.

Ponte, Lowell.
The Cooling
. Englewood, New Jersey: Prentice-Hall, 1972. El más elogiado de los libros de los años setenta que prevenían de una inminente glaciación. (En la cubierta se pregunta: «¿Ha empezado ya la siguiente glaciación? ¿Sobreviviremos?»). Contiene un capítulo sobre cómo podríamos modificar el clima global para impedir el enfriamiento excesivo. Una cita típica: «Simplemente no podemos permitirnos pasar por alto esta posibilidad. No podemos arriesgarnos a la pasividad. Los científicos que afirman que entramos en un período de inestabilidad climática, [es decir, imprevisibilidad] actúan de manera irresponsable. Los indicios de que nuestro clima pronto puede cambiar a peor son demasiado evidentes para pasarlos por alto» (p. 237).

Pritchard, James A.
Preserving Yellowstone’s Natural Conditions: Science and the Perception of Nature
. Lincoln, Nebraska: University of Nebraska Press, 1999. Balance de pruebas de que el alce ha cambiado el hábitat. También el paradigma del no equilibrio.

Pronin, Emily, Carolyn Puccio, y Lee Rosh. «Understanding Misunderstanding: Social Psychological Perspectives». En Gilovitch,
et al
., pp. 636-665. Una fría evaluación del desacuerdo humano.

Rasool, S. I., y S. H. Schneider. «Atmospheric Carbon Dioxide and Aerosols: Effects of Large Increases on Global Climate»,
Science
(11 de julio de 1971): 138-141. Un ejemplo de la investigación llevada a cabo en los años setenta que afirma que la influencia humana en el clima provocaba enfriamiento, no calentamiento. Los autores sostienen que el aumento de dióxido de carbono en la atmósfera no incrementará la temperatura tanto como la reducirán el aumento de los aerosoles. «Un aumento en solo un factor de cuatro en la concentración de fondo de los aerosoles puede bastar para reducir la temperatura de superficie en 3,5 K… lo que se cree puede bastar para desencadenar una glaciación».

Raub, W D., A. Post, C. S. Brown, y M. F. Meier. «Perennial ice masses of the Sierra Nevada, California»,
Proceedings of the lnternational Assoc. of Hydrological Science
, n.º 126 (1980): 33-34. Citado en Guyton, 1998.

Reference Manual on Scientific Evidence
, Federal Judicial Center. Washington DC: US Government Printing Office, 1994. Después de años de abusos, los tribunales federales de Estados Unidos establecieron directrices detalladas para la admisibilidad de diversas clases de testimonio científico y prueba científica. Este volumen tiene 634 páginas.

Reiter, Paul, Christopher J. Tomas, Peter M. Atkinson, Simon I. Hay, Sarah E. Randolph, David J. Rogers, G. Dennis Shanks, Robert W Snow, y Andrew Spielman. «Global Warming and Malaria: A Call for Accuracy»,
Lancet
4, n.º 1 (junio de 2004).

Rice, Glen E., y Steven A. LeBlanc, eds.
Deadly Landscape
. Salt Lake City, Utah: University of Utah Press, 2001. Más pruebas sobre el violento pasado humano.

Roberts, Leslie R. «Counting on Science at EPA»,
Science
249 (10 de agosto de 1990): 616-618. Un importante y breve informe sobre la clasificación de riesgos de la EPA. En esencia hace lo que quiere el público, no lo que aconsejan los expertos de la EPA. Esto es malo a veces pero no siempre.

Roszak, Theodore.
The Voice of the Earth
. Nueva York: Simon and Schuster, 1992. Roszak está a menudo a la cabeza de movimientos sociales nacientes, y aquí ofrece una precoz percepción de una mezcla de ecología y psicología que se ha difundido desde entonces, pese a que es básicamente puro sentimiento sin fundamento objetivo. No obstante, la ecopsicología se ha convertido en luz y guía en las mentes de muchas personas, especialmente de aquellas sin formación científica. En mi opinión, el movimiento proyecta las insatisfacciones de la sociedad contemporánea sobre el mundo natural que tan rara vez se ha experimentado que proporciona una pantalla de proyección perfecta. Uno debe también recordar la contundente opinión de Richard Feynman: «Hemos aprendido a partir de mucha experiencia que todas las intuiciones filosóficas sobre lo que va a hacer la naturaleza fallan».

Russell, Jeffrey B.
A History of Witchcraft, Sorcerers, Heretics and Pagans.
Londres: Thames and Hudson Ltd., 1980. Para no olvidarnos.

Salzman, Jason.
Making the News: A Guide for Activists and Non-Profits
. Boulder, Colorado: Westview Press, 2003.

Santer, B. D., K. E. Taylor, T. M. L. Wigley, T. C. Johns, P. D. Jones, D. J. Karoly, J. F. B. Mitchell, A. H. Oort, J. E. Penner, V. Ramaswamy, M. D. Schwarzkopf, R. J. Stouffer, y S. Tett. «A Search for Human Influences on the Thermal Structure of the Atmosphere»,
Nature
382 (4 de julio de 1996): 39-46. «Es probable que [el cambio de temperatura en la atmósfera libre] se deba parcialmente a las actividades humanas, aunque siguen existiendo muchas incertidumbres, relacionadas sobre todo con las estimaciones de la variabilidad natural». Aparecido unos años después de la declaración del Plee de 1995, según la cual se había detectado un efecto humano en el clima, este artículo de varios científicos del Plee muestra mucha más cautela respecto a esa afirmación.

Schullery, Paul.
Searching for Yellowstone: Ecology and Wonder in the Last Wilderness
. Nueva York: Houghton Mifflin, 1997. El autor fue durante muchos años empleado del Servicio Forestal y adopta un enfoque mucho más benévolo que otros acerca de los acontecimientos en Yellowstone.

Scott, James C.
Seeing Like a State: How Certain Schemes to Improve the Human Condition Have Failed
. New Haven, Connecticut: Yale University Press, 1998. Un libro extraordinario y original que nos recuerda hasta qué punto el pensamiento académico rara vez es genuinamente nuevo.

Shrader-Frechette, K.S.
Risk and Rationality: Philosophical Foundations for Populist Reforms
. Berkeley, California: University of California Press, 1991.

Singer, S. Fred.
Hot Talk, Cold Science: Global Warming’s Unfinished Debate
. Oakland, California: Independent Institute, 1998. Singer se encuentra entre los escépticos más visibles respecto al calentamiento del planeta. Un profesor de ciencias del medio ambiente retirado que ha ocupado diversos puestos gubernamentales, incluidos el de director del Servicio de Satélites Meteorológicos y el director de Centro de Ciencias Atmosféricas y Espaciales, es un defensor muy cualificado de sus opiniones, aunque sus críticos se nieguen a admitirlo. Normalmente intentan presentado como un chiflado excéntrico. Este libro tiene solo 72 páginas, y el lector puede juzgarlo por sí mismo.

Slovic, Paul, ed.
The Perception of Risk
. Londres: Earthscan, 2000. Slovic ha ejercido gran influencia al poner de relieve el concepto de «riesgo». Abarca no solo opiniones expertas sino también los sentimientos y temores de la población en general. En una democracia, estas opiniones populares deben encauzarse mediante la política. Yo adopto una postura más severa. Creo que la ignorancia debe encauzarse mediante la educación, no mediante regulaciones innecesarias o costosas. Por desgracia, las pruebas demuestran que gastamos demasiado en aplacar temores falsos o insignificantes.

Stott, Philip, y Sian Sullivan, eds.
Political Ecology: Science, Myth and Power
. Londres: Arnold, 2000. Centrado en África. Stott, ya retirado, es un autor ingenioso y tiene un blog divertido y escéptico.

Streutker, D. R. «Satellite-measured growth of the urban heat island of Houston, Texas»,
Remote Sensing of Environment
85 (2003): 282-289. «Entre 1987 y 1999, la temperatura media en superficie durante la noche de la isla de calor de Houston aumentó 0,82 ± 0.10 ºC».

Sunstein, Cass R.
Risk and Reason: Safety, Law, and the Environment
. Nueva York: Cambridge University Press, 2002. Un profesor de derecho examina las principales cuestiones ecologistas desde el punto de vista del análisis de la relación coste-beneficio y concluye que se necesitan nuevos mecanismos para evaluar las regulaciones si queremos liberarnos de la actual tendencia de «la histeria y la negligencia», por la que regulamos agresivamente riesgos menores a la vez que pasamos por alto otros más significativos. El detallado capítulo sobre los niveles de arsénico resulta especialmente revelador para cualquiera que desee comprender las dificultades con que se enfrenta una regulación racional en un mundo muy politizado.

Sutherland, S. K., y W R. Lane. «Toxins and mode of envenomation of the common ringedor blue-banded octopus»,
Medical Journal Australia
1 (1969): 893-898.

Tengs, Tammo O., Miriam E. Adams, Joseph S. Plitskin, Dana Gelb Safran, Joanna E. Siegel, Milton C. Weinstein, y John D. Graham. «Five hundred life-saving interventions and their cost effectiveness»,
Risk Analysis
15, n.º 3 (1995): 369-390. La Harvard School de Salud Pública es considerada en algunos sectores una institución derechista. Pero este estudio influyente y perturbador del Centro de Análisis de Riesgos de Harvard sobre los costes de regulación no ha sido rebatido. Da a entender que un gran esfuerzo regulatorio se malgasta y representa un derroche.

Thomas, Keith.
Man and the Natural World: Changing Attitudes in England 1500-1800
. Nueva York: Oxford University Press, 1983. ¿Son las actitudes ecologistas una cuestión de moda? El delicioso libro de Thomas examina las cambiantes percepciones de la naturaleza desde el punto de vista del peligro, luego como tema de veneración y por último como el adorado mundo salvaje de los estetas elitistas.

Thompson, D. W. J., y S. Solomon. «Interpretation of Recent Southern Hemisphere Climate Change»,
Science
296 (2002): 895-899.

Tommasi, Mariano, y Kathryn Lerulli, eds.
The New Economics of Human Behavior
. Cambridge, Reino Unido: Cambridge University Press, 1995.

Victor, David G. «Climate of Doubt: The imminent collapse of the Kyoto Protocol on global warming may be a blessing in disguise. The treaty’s architecture is fatally flawed»,
The Sciences
(primavera de 2001): 18-23. Victor es miembro del Consejo de Relaciones Exteriores y defensor del control de las emisiones de carbono que sostiene que «la prudencia exige una actuación para controlar el aumento de los gases de efecto invernadero, pero el Protocolo de Kioto es un camino a ninguna parte».

Viscusi, Kip.
Fatal Tradeoffs: Public and Private Responsibilities for Risk
. Nueva York: Oxford University Press, 1992. A partir de la sección III.

—,
Rational Risk Policy
. Oxford: Clarendon, 1998. El autor es profesor de derecho y economía en Harvard.

Vyas, N. K., M. K. Dash, S. M. Bhandari, N. Khare, A. Mitra, y P. C. Pandey. «On the Secular Trends in Sea Ice Extent over the Antarctic Region Based on
OCEANSAT-l MSMR
Observations»,
International Journal of Remote Sensing
24 (2003): 2.277-2.287.

Wallack, Lawrence, Katie Woodruff, Lori Dorfman, y Iris Diaz.
News for a Change: An Advocate’s Guide to Working with the Media
. Londres: Sage Publications, 1999.

Weart, Spencer R.
The Discovery of Global Warming
. Cambridge, Mass.: Harvard University Press, 2003.

West, Darrell M.
The Rise and Fall of the Media Establishment
. Nueva York: Bedford/St. Martin’s Press, 2001.

White, Geoffrey M.
Identity Through History: Living Stories in a Solomon Islands Society
. Cambridge, Reino Unido: Cambridge University Press, 1991.

Wigley, Tom. «Global Warming Protocol: CO
₂
, CH
₄
and climate implications»,
Geophysical Research Letters
25, n.º 13 (1 de julio de 1998): 2.285-2.288.

Wildavsky, Aaron.
But Is It True? A Citizen’s Guide to Environmental Health and Safety Issues
. Cambridge: Harvard University Press, 1995. Un profesor de ciencias políticas y política pública de Berkeley mandó a sus alumnos a investigar la historia y la posición científica de los temas más importantes relacionados con el medio ambiente: el DDT, el insecticida Alar, Canal Love (Nueva York), el amianto, el agujero en la capa de ozono, el calentamiento del planeta, la lluvia ácida. El libro es un excelente recurso para un estudio más completo de estos temas que lo que suele encontrarse. Por ejemplo, el autor dedica veinticinco páginas a la historia de la prohibición del DDT, veinte páginas al Alar, y así sucesivamente. Wildavsky concluye que casi todas las afirmaciones ecologistas han sido falsas o muy exageradas.